La sostenibilidad, eje de futuro de la certificación

 

 

Uno de los resultados de la situación económica que venimos experimentando desde 2008, es que ha acelerado cambios que ya venían desarrollándose. Uno de los más destacados es que la competencia se ha acentuado, no ya a escala global, sino también en cada mercado local.

Por ello es importante el contar con una marca que despierte confianza entre todos los stakeholders de una organización. En el mundo empresarial, ya están empezando a quedar lejos los tiempos en los que lo que se les requería era un producto o servicio de calidad a la altura de las expectativas.

 

Hoy, una empresa valorada como de calidad, debe ser capaz de ir mucho más allá: debe ser eficaz y eficiente y realizar una gestión que considere los aspectos ambientales, la innovación, los riesgos (laborales, penales, de imagen y reputacionales, financieros, etc.). En resumen, debe ser una empresa responsable y sostenible, con visión no solo en el corto plazo, sino también en el medio y en el largo; y debe pensar no sólo en el beneficio para los propietarios sino también debe ser percibida y destacar aportando beneficios para sus clientes, empleados, proveedores, etc. Y cómo sus diferentes grupos de interés la perciben y la reconocen.

 

En este entorno, la certificación por parte de un tercero independiente y de prestigio ve reforzado su papel como reconocimiento ante clientes, proveedores, administraciones públicas, empleados y valorado por el público. Conforme en los hábitos de consumo de los consumidores tanto corporativos-públicos como individuales aumenta la valoración de los comportamientos responsables, la sostenibilidad en un sentido amplio es uno de los ejes de futuro de la certificación, favoreciendo un modelo de desarrollo sostenible que combine los factores económicos, con la gestión ambiental, los aspectos sociales y un gobierno de la organización responsable. La sostenibilidad desde una visión global e internacional es un requisito para la competitividad de las organizaciones.

 

AENOR ha venido desarrollando un intenso trabajo de innovación para apoyar a las organizaciones en su compromiso con la sostenibilidad. En AENOR participamos con GRI, siendo GRI Organisational Stakeholder desde el año 2004, y lideramos el grupo de trabajo de sostenibilidad y responsabilidad social de IQNet, la mayor red mundial de entidades de certificación, entre otras actividades a nivel nacional e internacional. Ello nos permite ofrecer a las organizaciones certificaciones conforme a los modelos y sistemas más avanzados y reconocidos a nivel internacional, que les ayudan a gestionar adecuadamente la RS, a través de una apuesta sistemática, seria y rigurosa.

 

Por ejemplo, con las auditorías de RS según el modelo IQNet SR10, con el que están trabajando organizaciones de más de 20 países. Se trata del primer Sistema de Gestión de la RS respaldado por una red internacional. IQNet SR10 establece los requisitos para definir, implantar, mantener y mejorar un sistema de gestión con el propósito de integrar la RS en toda la organización. IQNet SR10 asegura que todos los grupos de interés serán contemplados, es integrable en otros Sistemas de Gestión como ISO 9001  o ISO 14001 y está alineado con los requerimientos de documentos sobre los que existe un consenso mundial, como la ISO 26000. 

Además, la entidad realiza la verificación de Memorias de Sostenibilidad según los criterios de GRI. AENOR ha validado cerca de 300 memorias GRI, lo que la convierte en uno de los principales verificadores del mundo. Asimismo, AENOR realiza las auditorías éticas para la cadena de suministro según Sedex Smeta.

 

Dentro del buen gobierno y de la gestión de los riesgos, AENOR ha desarrollado varias certificaciones relevantes como la especificación EA31 “Sistema de Gestión del Riesgo en las organizaciones”, que ayuda a reducir riesgos; la de gestión de emergencias basada en la norma ISO 20232, que contribuye a que las organizaciones implicadas en la respuesta ante un incidente funcionen con una eficacia conjunta y de manera óptima; o más recientemente el “Modelo de Gestión de Riesgos para la Prevención de Delitos”, que tiene como principal objetivo ayudar a reducir y gestionar el riesgo penal de las organizaciones. 

 

Otras iniciativas que podemos destacar son las auditorías de Empresa Familiarmente Responsable; de Empresa Saludable; conforme a la  especificación para Centros Especiales de Empleo o la colaboración para la realización de auditorías conforme a la Ley de RSE del  Gobierno de Extremadura, entre otros.

 

Entre las certificaciones más recientes también puede mencionarse la de Gestión de la Energía UNE-EN ISO 50001, que ayuda a reducir el consumo de energía en las organizaciones, los costes financieros asociados y las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI). En definitiva, innovando con certificaciones que apoyan a las empresas para que sean más sostenibles, responsables y competitivas.

 

 

 

Fuente: corresponsables.com

 

 

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